El Norfolk Terrier es una raza de perro originaria de Inglaterra.
Es miembro de la familia terrier y es conocido por su personalidad juguetona, determinación y amor por las actividades al aire libre.
El Norfolk Terrier es de pequeña estatura (23-25 cm), de aspecto compacto y bien proporcionado.
Tiene una cabeza grande y redonda, ojos expresivos y orejas caídas de tamaño mediano.
Su cuerpo es robusto (entre 5 y 5,5 kg), de espalda corta y recta, pecho profundo y extremidades musculosas.
Su cola suele llevarse recta y es de longitud moderada.
El pelaje del Norfolk Terrier es denso, áspero y resistente a la intemperie.
Los colores comunes de esta raza son el rojo, el trigo, el negro y el fuego y el grisáceo.
Algunos Norfolk Terriers también pueden mostrar marcas blancas en el pecho y las extremidades.
En términos de personalidad, se sabe que el Norfolk Terrier es un perro valiente, inteligente y dedicado a su familia.
Es enérgico, juguetón y le gusta participar en actividades como correr, cazar o simplemente jugar en el jardín.
A pesar de su pequeño tamaño, tiene una gran personalidad y puede ser imprudente ante los desafíos.
El Norfolk Terrier es generalmente amigable con los miembros de su familia y se lleva bien con los niños.
Sin embargo, puede ser reservado o cauteloso con los extraños, lo que lo convierte en un buen perro guardián.
La socialización temprana es importante para ayudar a generar confianza y fomentar interacciones positivas con otros perros y animales.
En cuanto al cuidado, el Norfolk Terrier necesita un cepillado regular para mantener su pelaje en buenas condiciones.
Se recomienda depilarse dos veces al año para eliminar el pelo muerto y mantener el pelaje sano.
Al igual que con todos los perros, el cuidado dental regular, los controles de oído y las visitas al veterinario son esenciales para garantizar su salud en general.