El Pastor de Shetland es una raza de perro de pastoreo originaria de las Islas Shetland en Escocia. Este perro es conocido por su inteligencia, agilidad y devoción a su familia. Con su doble capa y ojos expresivos, es tanto hermoso como funcional, sirviendo originalmente para reunir ganado en el terreno accidentado de las islas.
El Pastor de Shetland es un perro de tamaño pequeño a mediano, que mide entre 35 y 41 cm a la cruz y pesa típicamente entre 6 y 12 kg. Tiene un cuerpo bien proporcionado, con una cabeza en forma de cuña, orejas triangulares y una cola que se enrolla sobre su espalda. Su pelaje es denso y áspero al tacto, lo que le permite soportar las inclemencias del tiempo.
El pelaje del Pastor de Shetland es doble, con un subpelo suave y denso que lo protege de las inclemencias del tiempo, y un pelaje exterior más largo y áspero. Los colores de pelaje más comunes incluyen merle, negro, azul merle, sable y blanco. Se necesita un aseo regular, incluyendo cepillado, para prevenir enredos y mantener el pelaje en buenas condiciones.
Los machos miden típicamente entre 36 y 41 cm, mientras que las hembras miden entre 35 y 40 cm a la cruz. El peso varía de 6 a 12 kg, dependiendo del tamaño y la condición física del perro. Su construcción ágil les permite ser rápidos y eficientes en sus movimientos.
El Pastor de Shetland es un perro muy inteligente, curioso y enérgico. Está muy unido a su familia y puede ser protector, lo que lo convierte en un excelente perro guardián. Sociable y amigable, se lleva bien con los niños y otros animales. Sin embargo, a veces puede ser reservado con extraños. La capacitación y socialización tempranas son esenciales para que prospere.
El Pastor de Shetland es generalmente saludable, pero puede estar predispuesto a ciertas enfermedades hereditarias, particularmente problemas oculares como la displasia retiniana y problemas ortopédicos. Es importante proporcionar atención veterinaria regular, una dieta equilibrada y ejercicio adecuado para mantener su salud.