El Malinois es una de las cuatro variedades de perros pastor belga, conocido por su alta inteligencia, agilidad y versatilidad como perro de trabajo. Frecuentemente utilizado por las fuerzas del orden, el ejército y en deportes caninos, el Malinois es especialmente valorado por su instinto protector y energía inagotable.
El Malinois es un perro de tamaño mediano, bien proporcionado y atlético. Generalmente mide entre 58 y 62 cm para los machos y entre 56 y 60 cm para las hembras. Su estructura muscular es ligera pero poderosa, lo que le permite ser rápido y resistente. Su pelaje es corto, denso y suele ser de color leonado con una máscara negra.
El Malinois tiene un pelaje doble: una capa interna densa que lo protege de los elementos y una capa externa más dura que se adhiere al cuerpo. Su color es predominantemente leonado con una máscara negra distintiva. Se necesita cepillarlo regularmente para mantener el pelaje en buen estado, especialmente durante los periodos de muda cuando pierde más pelo.
Los machos Malinois suelen pesar entre 25 y 30 kg, mientras que las hembras son ligeramente más ligeras, pesando entre 20 y 25 kg. Su estructura ósea ligera, combinada con músculos poderosos, les confiere robustez y velocidad.
El Malinois es un perro extremadamente energético, inteligente y leal. Tiene un fuerte instinto protector, lo que lo convierte en un excelente perro guardián y de trabajo. Es profundamente devoto de su dueño, pero puede ser desconfiado con los extraños. Es esencial una socialización temprana y un entrenamiento firme, junto con mucho ejercicio y estimulación mental para mantener al perro equilibrado.
Generalmente, el Malinois es una raza resistente con una esperanza de vida de 12 a 14 años. Sin embargo, como muchas razas grandes, puede ser propenso a la displasia de cadera y codo. Las revisiones de salud regulares y una dieta equilibrada son esenciales para mantener su vitalidad.